Los paisajes de la Serranía de Cuenca desde la Piedra del Balcón, en Valdecabras

Esta semana en el espacio Nos vamos de excursión que coordina Fernando Carreras, de EcoExperience, y que emitimos los viernes en Hoy por Hoy Cuenca, nos acercamos a uno de los miradores más espectaculares y desconocidos de la Serranía de Cuenca, el de la piedra del Balcón en el entorno de Valdecabras, dentro del término municipal de Cuenca.

FERNANDO CARRERAS. Para llegar partiendo desde Cuenca, tenemos que salir por la Hoz del Júcar, por la carretera de la Playa, hasta el puente de Valdecabras para seguir después por la carretera que conduce a este pueblo. Una vez pasada la zona de curvas llegamos a una parte más alta y llana donde, al continuar, veremos a mano derecha una gran cavidad. Aquí es justo donde comenzamos a ver el lapiaz de la Ciudad Encantada o, lo que es lo mismo, las rocas con diferentes formas.

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Esa cavidad es la Cueva de los Morceguillos, declarada microrreserva natural. Aquí tenemos que ir atentos, ya que, un poco más adelante, en la carretera y a mano izquierda, encontraremos un espacio dónde podemos dejar nuestro vehículo.

Desde aquí comenzamos la ruta a pie. Es fácil encontrarla y guiarnos ya que, aunque no es un sendero marcado como PR, sí que alguien se ha encargado de colocar en la mayoría de pinos o arbustos que vemos durante el recorrido, algunos lazos de color verde que nos van indicando por dónde debemos ir.

Comenzamos a andar a mano izquierda siguiendo ese recorrido de lazos que nos lleva entre el pinar y entre grandes rocas. No hay que olvidar que estamos dentro del macizo que forma la Ciudad Encantada y por lo tanto dentro de la finca de la misma.

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Seguimos la senda hasta ver un desvío a mano derecha que nos llevará al primer mirador que queremos visitar. Nos encontramos en la parte alta de una muela y aquí tenemos ya unas vistas impresionantes. Caminamos entre pasadizos de rocas, de pequeños tormos y arcos. Por aquí continuamos hasta un punto donde veremos a lo lejos una roca con un gran agujero en el interior, es la conocida como Piedra del Balcón.

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En este punto tendremos unas impresionantes vistas sobre el valle del Cambrón. Abajo, en la llanura, descubrimos un gran número de edificios dentro de una finca que se ha reformado durante los últimos años. Este mirador es también es un buen lugar para avistar aves rapaces y buitres que sobrevolarán por nuestras cabezas y por supuesto, una gran cantidad de mamíferos como ciervos, jabalíes y corzos ya que hay mucha menos presión humana que unos kilómetros más adelante en la Ciudad Encantada.

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Una vez que llegamos al mirador de la Piedra del Balcón podemos continuar un poco más rodeando la muela hasta la Punta de la Grulla o volver por el camino siguiendo de nuevo los lazos indicadores hasta volver al punto donde dejamos el vehículo. Aproximadamente son unos 10 kilómetros de un recorrido muy fácil entre pinares y vegetación típica de la Serranía Alta de Cuenca.