A ti, que crees en mi trabajo y lo valoras.
A ti, que me has validado en la escritura, profesión en la que me sentía ilícita por el gran respeto que le tengo.
A ti, que aunque no estés de acuerdo con mi mapa lo respetas y me respetas.
A ti, que te das permiso para abrirte delante de otras personas provocando que se abran.
A ti, que hablas del dolor con la naturalidad que requiere para que lo integremos como parte de la vida.
A ti, que me has acompañado en esta plataforma el tiempo suficiente como para que tenga la certeza de que es el lugar en el que quiero estar. Por ahora.
A ti, que vas a formar parte de lo que vamos a construir a partir del uno de enero.
Gracias.
Estamos a punto.
Estamos aquí.